logo nacionales para tontos
que conectaba a personas que viajan frecuentemente en su propio transporte con otros usuarios que quieren desplazarse al mismo destino. La iniciativa copiaba el maniquí de negocio de otras startups que no obstante se han consolidado en mercados extranjeros, como Amovens o BlaBlaCar. Luego de dos meses de trabajo ininterrumpido, llegan a su fin l